Recuerdo

No hace tanto tiempo

Recuerdo, y de esto no hace tanto tiempo, una época en la que los sindicatos hacían tanta presión que cuando llegaban a la Dirección General para cualquier tema, el edificio temblaba.

Sus representantes tenían fama de conflictivos, porque exigían, digo bien, exigían los derechos de sus representados y eran capaces de movilizar a toda la masa salarial para conseguirlo.

Los “jefes” de los servicios de personal se ponían de los nervios. Los directores generales, los secretarios, todos intentaban paliar las meteduras de pata y pactar para no encontrarse con “males mayores”. De eso, no hace tanto tiempo.

Pero aquellos, los buenos, aquellos que pese a ser criticados (no nos engañemos, todos hemos creído siempre que los representantes sindicales miraban por su interés propio, que no lo hacían por nosotros, sino por ellos mismos, para conseguir un puesto de mando en los concursos, o para un traslado a un centro mejor) lucharon y consiguieron para todos unas condiciones mejores, unos resultados que ha la vista está funcionaron.

Se fueron, cansados de luchas internas contra ejecutivas comprables, cansados de poner carne en la brasa sin apoyos, con palos en las ruedas a cada pedalada.

Y llegaron los nuevos, aquella carne fresca que se esperaba que fuera, si no más, por lo menos igual de buenos. Y que ha pasado? Nada, no ha pasado nada. Simplemente que todos ellos, sea UGETE, sea COCOS, sea CATACRAC, o sea CESI·F, cual sean sus siglas, nos venden. Cuando llegan a Dirección general, lo hacen como corderos (no como lobos con piel de cordero, eso lo hacen con sus compañeros). Se venden, se dejan vapulear, simplemente porque no son eficientes, porque no tienen ni puta idea de cómo se hacen las cosas. Porque estos si que están interesados en su interés propio, porque no luchan, ya no digo por conseguir, sino por mantener los derechos que tanto costó a otros lograr.

Mientras tanto, los nuevos funcionarios e interinos, aquellos que no han visto otro tiempo mejor, les ofrecen su sonrisa, su beneplácito, porque desconocen lo que se vivió no hace tanto tiempo, porque como pobres ignorantes, desconocen que hubieron acuerdos que costaron muchas horas, demasiadas horas para conseguirlos, como el hecho de que hoy podamos cobrar suplementos en nuestro sueldo, tan criticados por otros sectores, como son el “piño” y el “pipe”, pero que desconocen de donde salieron y el porqué.

¿Vendidos? Sí, estamos vendidos, por una pandilla de ineptos, que no tienen ni puñetera idea de condiciones de personal, que acuerdan soluciones que perjudican a todos y a cada uno de nosotros.

No nos confundamos, esta nueva representación sindical no es tal. No representan a nadie salvo a si mismos. No luchan por nada que no sea su beneficio propio, no son capaces de encararse a su ejecutiva, como otros hicieron antes, no son capaces de luchar por sus afiliados ante quien nos pone el yugo nuevamente en el cuello.

Y mientras tanto… Martinis, playita, sol, cafés... entre risas con personas de su nivel y los demás... a remar contra corriente.

Saludos,

LaYessy