El Reglamento de UGT Presons prohíbe expresamente el uso de horas sindicales en fin de semana, a menos que se haga para asistir a actos convocados por el sindicato y previa autorización del responsable del sindicato de prisiones.
Pues bien, el pasado sábado día 30 de abril, un destacado militante de CDC incorporado recientemente al elenco de delegados de UGT en el C.P. Lledoners dentro de la nueva política de hermanamiento entre sindicato y Govern puesta en marcha por los actuales responsables de UGT Presons, hizo uso de su crédito de horas sindicales para, como él mismo se jactaba al incorporarse por la tarde al centro, asistir a una convención ( y posterior comida) de candidatos del partido gubernamental a las próximas elecciones sindicales. Curiosamente, el día siguiente, 1 de mayo, en que su sindicato convocaba diversas manifestaciones, el abnegado sindicalista (cuyos únicos méritos sindicales parecen ser su militancia política y su estrechísima amistad con una altísima, metafóricamente hablando, dirigente de UGT Presons) no creyó necesario usar las horas sindicales para acudir, ahora sí, a los actos convocados por su organización sindical. Este uso de las horas sindicales sólo puede ser autorizado, como se ha dicho, por el responsable del sindicato de prisiones, Xavier Martínez. Si no es así, el delegado debería ser sancionado y perder tal condición, aun a riesgo de poner en peligro la especialísima relación establecida con la Administración. De no actuar en este sentido, sólo cabrá concluir que, efectivamente, el permiso para gastar horas sindicales acudiendo a actos de partido y la no obligatoriedad de asistir a manifestaciones en que se criticaba la política antisocial del actual Govern, habían sido autorizadas por Xavier Martínez y, en consecuencia, forman parte del matrimonio por interés contraído entre el sindicato que calla ante los recortes de nuestras conquistas históricas y la Administración que nos recorta derechos pero tiene amordazados a los sindicatos a base de subvenciones y, parece ser, bolsas de horas sindicales indebidamente infladas.
Menudos jetas estos de UGT, no se les ve el pelo por los patios y ahora se meten a pillar en política,tendriamos que darnos de baja todos y que se quedasen sin sus malditas horas sindicales.
ResponEliminaEsto de las "horas en fin de semana" es una chorrada, al menos en prisiones, porque si un sindicalista tiene horario de interior y le toca ir a currar al sindicato entre semana, ¿cuando le tocará tener fiesta? ¿O es que un sindicalista no tendrá derecho a descansar y a estar con su familia? I si un sindicalista tiene horario de fin de semana y va todos los días al sindicato de lunes de viernes, ¿renunciará a sus horas para ENCIMA ir a trabajar a la prisión el sábado y el domingo? Parece mentira que se critique esto cuando la crítica no tiene sentido, y en cambio mucha gente no vea cosas verdaderamente graves e importantes, como por ejemplo que determinados sindicalistas cobren sobres de dinero en negro todos los meses...
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